1. Dicen que se van pero en realidad se quedan, al menos otro año más el primero. Ya se verá cuánto tiempo más la segunda.
2. Ambos se han apoyado en los nacionalistas. La ETA, sin el PNV, no hubiera pasado de bandolerismo más o menos iluminado. ZP sin PNV, CIU, Bloque y ER no hubiera podido socavar la unidad del país como lo ha hecho.
3. Nos dejan a sus secuaces en herencia –el zapaterismo, los batasúnicos-, perfectamente blanqueados y dispuestos a seguir en la brecha.
4. Llegaron para redimirnos de nuestros pecados y dicen que se van para que otros continúen en lo mismo. No se arrepienten de nada, sino todo lo contrario: están orgullosos.
5. Ambos se justifican y están obsesionados con el franquismo, al que ven encarnado en el Partido Popular. Ambos han hecho del PP la diana de todos sus ataques.
6. Los paralelismos terminarán convergiendo. Ni uno ni otra van a desaprovechar la oportunidad. Ambos saben que están amortizados. Ambos quieren pasar a la Historia, sin saber que ya han pasado: pero a la historia de la infamia. Lo que ambos no saben es que la historia de la infamia en España está saturada tiempo ha.
Y 7. Las consecuencias de la labor de ambos, como los residuos radioactivos, serán letales y se prolongarán en el tiempo. Ya no habrá vuelta atrás.
